El pasado 25 de abril la Comisión de Mercado Interior y Protección del Consumidor (IMCO), de la que formo parte, votó el informe del que he sido ponente sobre "Una Agenda del Consumidor Europeo para impulsar la confianza y el crecimiento".
Esta Agenda, aprobada casi por unanimidad en IMCO, supone un paso adelante para la defensa de los derechos de los consumidores y en la promoción de la información para aumentar su capacidad de elección frente a los mercados. Dado el contexto de crisis económica y social que vive Europa, la Agenda se adecua a las nuevas exigencias e intereses de los consumidores y les ofrece una mayor garantía de protección frente a posibles abusos.
En un post anterior ya comenté que el objetivo central de esta agenda es diagnosticar y poner en marcha las medidas necesarias para ayudar a generar la confianza que los consumidores europeos necesitan. Se trata, pues, de que los ciudadanos tengan la información y formación suficiente para que sus intereses prevalezcan frente a los del mercado. Y en este ejercicio, las asociaciones de Consumidores deben jugar un papel fundamental, para poder ejercer su tarea con todas las facilidades y apoyos institucionales.
Tras su aprobación por la Comisión IMCO, la Agenda pasará a su consideración final en el próximo pleno del Parlamento Europeo el 5 de julio. Allí se producirá la votación definitiva que confío que se dará en los mismos términos, o parecidos, que en IMCO.
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